Este domingo 4 de febrero, continuó el desarrollo de la Premier League con cuatro partidos programados correspondientes a la jornada 23. Uno de ellos fue la sorpresiva derrota 4-2 de Chelsea ante Wolverhampton en el Stanford Bridge.
Con este resultado, los Blues perdieron por segunda ocasión de manera consecutiva, recibiendo ocho goles en ese lapso. Además, que descendieron a la casilla 11 en la tabla de posiciones al quedarse con 31 puntos.
Por su parte, los Wolves llegaron a 32 puntos, escalando hasta el puesto 10, superando precisamente a su rival de esta fecha. Como si fuera poco rompieron una sequía de 45 años sin victorias en el mítico escenario londinense.
El desafío comenzó con los locales tratando de anotar en las primeras de cambio, gracias a varios ataques llenos de mucho peligro. Esto generó que a los 19’ se abriera el marcador producto de una gran anotación de Cole Palmer.
Sin embargo, la alegría de los hinchas locales duró muy poco, luego de que a los 22’ se concretó el empate a través de Matheus Cunha. Poco más de 20 minutos después, específicamente a los 43’, la visita tomó la delantera cuando en una jugada desafortunada, Axel Disasi marcó un gol en contra.
Con el 2-1 a favor de los Wanderers se fueron al descanso, motivo por el cual una vez inició la etapa complementaria, los dirigidos por Mauricio Pochettino buscaron la igualdad por todos los medios, aunque no pudieron encontrar los espacios necesarios debido a una gran defensa impuesta por el rival.
Cuando los de casa estaban pasando por su mejor momento el juego, apreció Cunha para silenciar los miles de asistentes con una espectacular definición colocando las acciones el 3-1 y a su vez marcar su segundo tanto en la jornada.
En el tramo final del compromiso, los Blues hicieron lo posible para acercarse en la pizarra, aunque en lugar de ello apareció el 4-1 a los 82’, luego de que el principal decretara una pena máxima que fue ejecutada en gran forma por Cunha quien celebró su tercera anotación de la fecha.
Tan solo dos minutos más tarde, los anfitriones reaccionaron, producto de un gol de Thiago Silva que puso el marcador 4-2, sin embargo, fue demasiado tarde y Wolverhampton se fue del Stanford Bridge con los tres puntos.
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