Federico Valverde recibió una insólita invitación para concurrir al partido entre Peñarol y Rosario Central, el reciente martes en el estadio Campeón del Siglo, y la respuesta resultó bastante obvia dado los días que vive.
El duelo generaba una enorme expectativa, dado que el ganador de ese cruce avanzaría a los octavos de final de la CONMEBOL Libertadores 2024. Finalmente, el Manya ganó 2-1 y celebró el pase, pero lo curioso ocurrió en la previa.
Es que el presidente del club aurinegro, Ignacio Ruglio, contactó a Pajarito para que fuera al recinto montevideano a presenciar el encuentro. Seguramente, al notar el arribo a su país de la masa de futbolistas que terminaron su temporada en Europa, a la vez que varios de ellos se enfocan en la preparación para la Copa América.
La cuestión es que Valverde es el único entre los uruguayos que se encuentra en una situación particular y es por eso que se lo hizo saber al máximo dirigente de Peñarol. "Nacho, el sábado juego la final de la Champions", le contestó el centrocampista.
Al contar la anécdota, Ruglio reconocía que se trataba de un "papelón", aunque se justificó por su desinterés en lo que pasa afuera. "No soy de mirar fútbol del exterior. No está dentro de mi realidad diaria. Para mí el fútbol es Peñarol", continuó en entrevista con el programa Bro Stream Club.
De todas maneras, el mandamás del Carbonero quiso aclarar: "Después, como presidente, empezás a mirar mucho más fútbol porque te hablan de algún jugador, pero no soy como esa gente que es hincha del fútbol y puede pasar un sábado de tarde mirando tres partidos".
Valverde es una de las figuras del Madrid y el sábado jugará en Wembley por un nuevo título de Champions League: se enfrentará con Borussia Dortmund.
Foto: Manu Fernandez/AP