Luis Enrique lamentó la derrota de su equipo a manos de Barcelona por 3-2 en el Parque de los Príncipes, por la ida de los cuartos de final de la UEFA Champions League. Un resultado que lo deja contra las cuerdas y la obligación de tener que remontar la próxima semana en Cataluña.
Paris Saint-Germain fue capaz de remontar la desventaja inicial, que tuvo como autor a Raphinha, a partir de las conquistas de Ousmane Dembélé y Vitinha en una ráfaga de dos minutos en el arranque del complemento.
Sin embargo, dos desatenciones defensivas (una de ellas por el mérito del gran pase de Pedri) dejaron al elenco de la capital francesa con las manos vacías: Raphinha firmó su doblete y Andreas Christensen, solo y sin marca en el área chica, cabeceó el envío de córner de Ilkay Gündogan al fondo del arco.
Con un Kylian Mbappé lejos de haber sido filoso y un equipo que lució desequilibrado, el entrenador asturiano del PSG no tuvo más remedio que aceptar su responsabilidad. "Es evidente que el resultado desacredita mis decisiones, acepto todo lo que supone una derrota", analizó el técnico luego del encuentro al referirse al planteo.
De todas maneras, confía plenamente en poder remontar la eliminatoria. "Nosotros no tenemos nada con lo que especular, vamos a ir a ganar. Cada eliminatoria está igualada en estos cuartos y espero que estemos más acertados y ganar el partido. Solo nos vale la victoria", anticipó el ex Barça, que se vio derrotado por el conjunto de Xavi, al que supo dirigir hace una década.
"No tengo ninguna duda de que lo podemos conseguir y lo vamos a lograr. Si hay un equipo que no especula y sale a ganar cada partido, somos nosotros. No hemos perdido en liga fuera de casa. Dependemos de ganar ese partido", se esperanzó.
En materia estadística, según los datos que arroja la agencia Opta, PSG tuvo mayor tenencia de pelota (58,6%) en el cruce ante los Culés, registró más remates totales (18 vs. 15) y dio 567 pases contra 39 frente a un rival que practica un fútbol de posesión.
A nivel histórico, Paris Saint-Germain concedió tres goles en un partido de la Champions en casa por primera vez desde que perdiera 3-1 ante Manchester United en marzo de 2019.
Foto: Alex Pantling/Getty Images